De mal a bien

Hola gentecilla !!
Hoy ha sido de esos días en que lo único que te alivia es decir que para estar bien, primero hay que estar mal y pasar por este tratamiento de mierda.

Ha sido un día, mejor dicho, una semana bastante pesadita, con la boca mal, el estómago peor, el intestino haciendo de las suyas, ...en fin, un agobio que parece que se va pasando, pero poco a poco.

Estoy como con la sensación de que hay que tener paciencia, que para estar bien y que las células chungas no se instalen en ningun sítio de mi cuerpo (ya sabéis, este cuerpo serrano tan agradecido que tengo), ni hoy ni nunca más, hay que pasar por estos arrechuchones de cuerpo, pero volvemos al principio, con paciencia, hay que ser pacientes.

La verdad es que no estoy mal, físicamente no tengo la sensación de haber pasado muchas penurias que le oyes a otra gente y psíquicamente, en todo momento me he encontrado fenomenal, bien atendida por padres, hermanas, amigos..., solo que tengo un poco de agobio de que esto es muy largo, que tengo muchas ganas de terminar, de que alguien vaya diciendome que esto está funcionando, que el tratamiento está obteniendo los resultados esperados, en definitiva, que alguien, o sea, los todo poderosos médicos, que digan si todo va bien, pero como decía desde el principio, en este sistema sanitario nuestro (que creo que es el mejor), no se estila lo de ir informando con detalle de lo que está pasando, con lo que te quedas con las ganas de saber si todo va bien y a la espera de que termine y que te informen, y claro está, que te digan lo que quieres oir-todo ha salido bien- y entonces la espera desesperada tiene todas sus recompensas.

Creo que soy una paciente con paciencia, o es que no me queda otro remedio que ser positiva y como me va bien y no me encuentro tirada por los rincones, tiendo a pensar que si esto es lo peor, pues que no es tan malo y dentro de nada empezará lo mejor.

En fin, gentecilla que me lee, que hay veces que esta mujer paciente se encuentra impaciente y deseosa de noticias agradables que indiquen que ha llegado el final de lo peor y que ya empieza lo mejor.

Muchos besicos y de nuevo gracias por vuestra compañía.
Por cierto, el yoga me va muy bien, el otro día hizo que durmiera como un bebé, babeando y todo.